Investigando accidentes debidos a la mala calidad de la gasolina, Tintín cae en un Oriente Medio en plena ebullición debido al conflicto israelí-palestino de los años 50. La acción se centra en los intentos de Bab el Ehr para derribar del poder al Emir Ben Kalish Ezab, contra el fondo de la lucha por controlar el petróleo. (Reaparecen antiguos rivales y viejos conocidos. Se presentan Ezab y su estomagante hijo Abdallah. Quedan para la historia los espejismos de Hernández y Fernández en el desierto.)
6 agosto, 2008